Se ha vuelto una tradición que clubes europeos disputen sus partidos de preparación fuera de su continente. Los equipos de élite viajan principalmente a Estados Unidos o al continente asiático para ponerse en forma de cara al exigente calendario de las ligas y copas locales, y en su caso, competiciones continentales. Además de repartir espectáculo, viajan con la intención de recaudar ganancias fuera de casa.
El gran mercado mexicano
El continente americano se ha convertido, prácticamente, en una parada obligatoria para las mejores escuadras del mundo. Dentro de este bazar de clubes que se enfrentan, los conjuntos mexicanos se han popularizado para atender dichos encuentros. El gran atractivo que genera ver a las estrellas del balompié al público en general, sumado a la afición mexicana que en pocas oportunidades puede ver a su equipo favorito de la Liga MX, genera una increíble derrama económica.
Por ejemplo, a pesar de que “Los Cremas” no pudieron encontrarse con la victoria durante el Tour Águila, ya que sus encuentros con Chelsea y Manchester City resultaron en derrota y Real Madrid fue empate, el resultado económico fue más favorable que en lo deportivo. El partido Real Madrid ante la escuadra de Coapa registró sold out en el Oracle Park de San Francisco. Un total de 41 mil 915 aficionados abarrotaron la casa de los Gigantes de la MLB. Con lo anterior, se obtuvieron aproximadamente 3.35 millones de dólares únicamente por las entradas. Mientras, en Las Vegas, el Guadalajara enfrentó a la Juventus de Turín en el majestuoso Allegiant Stadium. La afición de Nevada no respondió acorde a la expectativa; ingresaron 31 mil 261 aficionados, para dejar al rededor de 2.5 millones de dólares únicamente de taquilla.
Otros beneficios
La taquilla y los servicios no son los únicos beneficios que otorgan estos partidos. Otra manera de ganar es por medio de la venta de la marca. Al enfrentar clubes de amplia trascendencia, la exposición de los productos es a nivel internacional. Esta impresión mundial otorga crecimiento en redes sociales y difusión de cualquier tipo de mercancía. Además, mejora la reputación de las franquicias y de la Liga MX. Por si no fuera poco, los jugadores pueden demostrar buen nivel y ser atractivos para potenciales compradores alrededor del globo.
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